Paseos por La Alfama
La Alfama es uno de los barrios más populares de Lisboa. Es pintoresco, bucólico, colorista e invita a pasear relajadamente entre sus calles. Goza de una privilegiada ubicación. Buena parte del barrio se encuentra junto al Castillo de San Jorge, en lo más alto de la ciudad, así que es una excelente opción para contemplar la capital de Portugal.
Una buena manera de llegar a La Alfama es haciendo uso del mítico tranvía 28. Se trata de una de las atracciones con más solera para el visitante por conservar su forma original. El billete se puede comprar en el propio tranvía, aunque hay otras opciones, como la tarjeta 7 colinas.
La Alfama es un laberinto encantador, así que lo mejor es perderse en él.
Calles estrechas y empinadas, fachadas de colores y olor a ropa tendida son algunas de las cualidades que lo definen. Eso y una necesidad imperiosa de fotografiar cada fachada. ¡Todas son especialmente bonitas!
Partimos desde el Castillo de San Jorge. Allí nos recreamos contemplando las vistas desde su mirador y tomando una rica cerveza portuguesa.
Al salir de San Jorge nos dejamos llevar entre las callejuelas y yendo de un mirador a otro. Entre mis preferidos se encuentran el Mirador de Santa Lucía, en la Rua do Limoeiro, y el Miradouro de Graça. Las vistas son sensacionales.
Pasear por La Alfama tiene un plus: la banda sonora. Hay restaurantes de fados en cada esquina, así que a ciertas horas lo habitual es que de ellos salgan bellas melodías portuguesas.
Beco dos Ramos, Beco das Barrelas, Rua de Sao Miguel, Largo Sao Rafael o las Escandinhas de Santo Estebao son algunas de las calles que fui apuntando para recordar en futuras visitas. Todas son muy fotogénicas.
También en La Alfama se encuentra la Catedral de La Se, de estilo románico. Fue restaurada en 1755 debido a los derrumbes que azotaron la ciudad. Así y todo, este barrio fue de los pocos que no salió mal parado tras el gran terremoto.
Tal y como adelantaba unas líneas más arriba, lo típico en este barrio es disfrutar de la rica gastronomía lisboeta en los locales de Fado. Sin embargo, en este post otorgo todo el protagonismo al restaurante que conquistó mi corazón: Río Coura.
Apostamos por el menú que recomiendan todos los foros: el arroz de marisco y la bandeja de pescados de distintas clases, todo acompañado por un vino verde. Sólo puedo decir que es un menú ganador, que no he probado arroz de marisco igual y que la cuenta no llegó a 20 euros por persona. En resumen: impresionante.
Río Coura se encuentra al lado de la Catedral, en la Rua Augusto Rosa, 30. Es pequeño, cabe poca gente, pero es muy rápido. Merece la pena esperar un rato en la calle tomando un vino verde hasta que se quede una mesa libre.
Y hasta aquí este paseo por La Alfama. Podéis ver más rutas por Lisboa en post anteriores: Lisboa, amor a primera vista.
Y, como siempre, ¡espero vuestros comentarios y recomendaciones!
Marta.